


Me acuerdo que me costó un Perú (es muy de viejo, si) resolver la tapa, estuve bocetando a lo loco para representar una piedra con urticaria, dos cuestiones que hasta ese momento me parecian: lejanas entre si, ajenas al mundo de la literatura y a años luz de mí.
La vida de un ilustrador esta llena de sorpresas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario